Fue una experiencia fantástica en el Spa Thermalia. Desde el momento en que llegamos, el personal de recepción, en especial Víctor, fue muy servicial y educado. La habitación era espaciosa, con una salita y un sofá separados por puertas correderas. Todo estaba insonorizado y la temperatura era perfecta. El baño era amplio, con mucha luz y una ventana que proporcionaba luminosidad. El agua caliente estaba disponible al instante y el aseo estaba separado por una doble puerta. La cama era muy cómoda, con un edredón de plumas de calidad. Había armarios y muebles suficientes para guardar la ropa y las maletas. El comedor era magnífico y el desayuno excepcional. El dueño se aseguró de que todos los productos estuvieran disponibles y hasta nos trajo croissants y dulces bollos de una pastelería cercana. La cena también fue maravillosa, con ingredientes frescos y platos únicos. Además, el spa tenía jacuzzi, baño turco, sauna y un gimnasio bien equipado.

No tengo nada negativo que decir 😊.

Habitaciones modernas que contaban con buen wi-fi y también literas. Tienen un parking gratis cerca...

El hotel era lindo y estaba siempre muy limpio. Ha sido una experiencia agradable, y todo el personal era muy servicial. Habitacionestá muy bien amuebladas, con un buen wifi, WiFi gratis. Había una caja fuerte personal, una mesa de trabajo y un hervidor eléctrico, que me pareció genial. El lugar tenía una ubicación céntrica muy, pero que muy cerca de centro y también de la pastelería. La comida en Le Modern a poca distancia del hotel tenía todas las opciones imaginables. Me alojaría aquí de nuevo no importa cuando.

Mi estancia en el Spa Thermalia fue simplemente maravillosa. El edificio es magnífico, con un ambiente restaurado que te transporta a otra época. La habitación era muy espaciosa y estaba completamente insonorizada. El baño también era enorme, con mucha luz y una ventana que permitía la entrada de luminosidad natural. El agua caliente estaba disponible al instante y tenía una sala de aseo separada por una puerta doble. La cama era comodísima, con un edredón de plumas que me hizo sentir como en las nubes. Además, había amplios armarios con cajones para guardar mi ropa y maletas durante mis días de estancia. El comedor era magnífico y el desayuno excepcional; incluso cuando llegué un poco tarde, el dueño se aseguró de traer croissants frescos y otros dulces para mí. La cena también fue una delicia, con platos únicos y productos frescos de alta calidad. El spa era una verdadera joya, con jacuzzi, baño turco y sauna, además de una amplia gama de máquinas de gimnasio. Aunque la piscina termal estaba cerrada, eso no afectó mi experiencia en absoluto. En general, recomendaría este hotel sin ninguna duda.

En cuanto a los aspectos negativos, noté que en la ducha faltaba un soporte para el grifo, lo que hacía incómodo lavarme el pelo con una sola mano. Tenía que dejar el grifo en el suelo, lo cual no era ideal.

El hotel era fantástico y estupendo, mi habitación era de buen tamaño. Me ha gustado la habitación, la cama era cómoda. El baño era muy limpio y tenía una ducha adaptada y un secador de pelo. La ubicación de la propiedad era tranquila y excelente, en la plaza.

Aspectos positivos del Hotel Spa Thermalia en Chatel-Guyon: Edificio magnífico y recientemente restaurado. Personal de recepción atento y educado. Habitación amplia y confortable, con sala de estar separada. Baño espacioso y luminoso. Buena insonorización y calefacción. Cama cómoda y edredón de plumas. Desayuno excepcional. Cena deliciosa con productos frescos. Spa con jacuzzi, baño turco y sauna. Gimnasio bien equipado. Recomendable 100%.

El personal es competente y amable. La habitación tiene un buen tamaño. El precio de la comida es asequible. Se resolvió un problema con la ducha a petición. El hotel está a un paseo de 5 minutos del centro. Además, el Casino de Chatel-Guyon está relativamente cerca.

¡Una excelente relación calidad-precio! Este hotel ofrece instalaciones y servicios increíbles por el precio que pagamos. Definitivamente, una gran elección.

Nada que mejorar! Todo estuvo realmente bien.

El hotel está situado en una ubicación céntrica al lado del centro de la ciudad, de la plaza y también de la pastelería. El cuarto es cómodo, con tanto literas como una buena ducha. El personal es muy competente y atento, y la gerencia es estupenda.

Recomendaría este lugar a cualquiera, pasé unos días apasionantes. Estaba muy limpio, el personal era acogedor y excepcional. En general, la comida estaba buena y a un precio razonable. El restaurante Le Cèdre Bleu estaba en las cercanías.

El edificio magnífico, el personal fantástico, la habitación amplia y confortable, el desayuno excepcional, el spa con muchas facilidades.

No puedo encontrar nada malo.

La ubicación de este hotel es ideal, ya que se encuentra en el centro de la ciudad, lo que hace que sea muy conveniente para explorar los alrededores. está cerca de varias tiendas y restaurantes, lo que hace que sea fácil salir a cenar o hacer compras. Además, las habitaciones son muy amplias y cómodas, con detalles como una salita con sofá y un baño enorme con mucha luz natural.

Quizás el único aspecto negativo es que la cortina de la ducha es un poco pequeña y no cubre toda la bañera. Esto puede resultar incómodo a la hora de ducharse y puede provocar que el agua salpique fuera de la bañera.